Tan solo una carta romántica
Luz de un amanecer que aún extraño…
Las horas fueron eternas… cuando tú a mi lado no estabas…
Mi amor infinito fue… cuando lo alimentabas con absurdas, necias y locas palabras que susurrabas sin parar.
Yo, como una chiquilla abismada, te escuchaba… al cielo miraba y deliraba creyendo las estrellas alcanzar… pues mi sueño se desvaneció como la espuma que deja el mar… cuando, al caer la lluvia, su escarcha dejará.
Mas mi dolor profundo no me agobiará porque renace la ilusión que me rescatará de aquel momento absurdo que tendrá que pasar.
Porque te tengo y no te tengo
Tu sombra me abraza,
tus besos me atrapan…
y no estás ahí… ¿qué pasa?
Si tu ausencia está presente,
tu palidez ardiente y
aún no estás junto a mí…
Sueños presentes sólo tengo
para ti, aún con tu indiferencia
mis secretos son para ti.
Cuando canto y no canto
mi dedicación es para ti.
Quiero y no quiero
escucharte aunque estés
presente en mí.
Quisiera adivinar en tu mirar
transparente la sombra que acosa
mi existir, porque aunque te tengo
y no te tengo, tú no estás aquí.
Por eso tu sombra me abraza y
Vives en mí.
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